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Día del idioma español. Una lengua que te lleva a dar la vuelta al mundo

20 de abril de 2023

El 23 de abril es una fecha destacada en el calendario por muchas razones. Entre ellas, porque es la fiesta internacional del libro y los derechos de autor; es la efeméride de Miguel de Cervantes (entre tantos hombres y tantas mujeres de letras), uno de los escritores más emblemáticos de la literatura hispánica; y, por supuesto, el 23 de abril es asimismo la fecha en que los profesores aprovechan para realizar actividades diversas dedicadas al día de la lengua española. Por eso, es siempre una fantástica ocasión para descubrir las curiosidades del idioma y verlo con la perspectiva de nuestro mundo globalizado en el que el español convive con el resto de las lenguas.

Por todo ello, hoy estamos de celebración. Para aportar nuestro granito de arena a este tributo al español, nos gustaría compartir algunas observaciones y experiencias que, desde el equipo de español de Altissia, hemos tenido a lo largo de todos estos años trabajando con idiomas y con expertos procedentes de diferentes paisajes profesionales. En nuestros proyectos trabajamos con traductores, correctores, profesores, creadores de contenidos pedagógicos para la enseñanza de español como lengua extranjera..., entre tantos otros perfiles que nos permiten llevar a cabo nuestros objetivos garantizando siempre la mejor calidad. Todos estos oficios nos aportan experiencias muy diversas en torno al trabajo y, hoy, nos gustaría compartir algunas reflexiones y descubrimientos acerca de la traducción.

El español del traductor

Ser traductor es adoptar una personalidad desdoblada, entender el mundo con dos pares de ojos distintos. Hay que conocer bien y estar al día de la lengua corriente desde la que se traduce, de las palabras que se han incorporado recientemente, de las expresiones propias de una lengua orgánica que van cambiando de generación en generación... Y, sobre todo, hay que tener un inmenso conocimiento de la lengua materna para dar voz propia a estas palabras extranjeras. Lo que aporta la traducción es la conciencia de esta percepción del mundo y de sus sonidos, una percepción que es íntima y propia de cada lengua.
Estas revelaciones empiezan siempre por casualidad. A la hora de traducir un texto, de repente hay que adaptar la risa, que en francés se escribe "ha ha ha", pero que un hispanohablante la va a representar con "j", "ja ja ja", lo que sería impronunciable para un francófono... Es muy divertido ¿verdad? Es curioso, los hispanohablantes ríen desde la parte trasera del paladar, mientras que los francófonos lo hacen golpeando las cuerdas vocales. Y así es como cada lengua interpreta a su manera los sonidos del mundo. Otro ejemplo de los sonidos en español es, que cuando un hispanohablante da un beso escribe "chuic" o "mua", o cuando un perro ladra, en español se escribe "guau", o el parpeo del pato, "cua cua"... Sin embargo, esto solo es el principio del rompecabezas de la traducción...

La lengua española en el mundo

Cuando se traduce un libro al español, lo último que quieren las editoriales es cerrarse las puertas y quedarse en casa. Es decir, el español no es solo la lengua que se habla en España o en los países hispanos de América Latina, sino que es la lengua materna de más de 496 millones de personas originarias de la mayoría de los continentes del planeta, y además, si tenemos en cuenta las personas que estudian español, comprobamos que el 7,5 % de la población mundial es un lector potencial de esta futura traducción. Por lo tanto, cuando elegimos las palabras no podemos perder de vista estos horizontes múltiples, desperdigados por todo el mundo. Tampoco es realista pensar que se puede salvar la variedad diatópica de la lengua, ¡y qué alivio que así sea! La belleza y la riqueza de cualquier lengua es justamente esta amalgama de palabras que dicen lo mismo, pero de manera tan distinta, y a la vez con un sinfín de matices... Aun así, en este sector no es raro encontrarse con encargos en los que los editores piden traducciones o correcciones en "español neutro". ¿Acaso eso existe? Os vamos a dar algunos ejemplos, que seguro que os suenan... Hay muchos manuales de estilo que proponen alternativas para favorecer esta neutralidad: se recomienda usar "tomar o agarrar" en lugar de "coger" (para no crear confusiones importantes en América Central...); privilegiar el uso del pretérito indefinido en lugar del pretérito perfecto (un tiempo verbal que se usa a de manera generalizada en España pero menos comúnmente en México, parte de Bolivia, Chile o Puerto Rico...); el tratamiento de "tú" o de "usted", en función del público objetivo y zona geográfica de destino... La lista es larga, sobre todo cuando se pretende "neutralizar" el vocabulario, usando, por ejemplo, "amante" o "novio/a" cuando en cada país hispanohablante existe una manera propia de decirlo. En Perú, Guatemala, Ecuador, Honduras, Nicaragua, México, República Dominicana o Cuba..., solo para citar algunos, dirían más bien: "agarre", "chavo/a", "churri", "chorbo/a", "costilla", "empate", "firme", "jaino/a", "jaño/a", "jevo/a", "ligue", "pinche", "pololo/a", "voladito/a"...

Y esto también sucede (¡y así debe seguir siendo!) en una clase de lengua de nivel más avanzado, donde los estudiantes llevan en la mochila bagajes distintos y españoles diversos. Responder al "¿cómo se dice en español...?" es siempre difícil porque depende. Depende de en qué país te encuentres. Aunque como debemos partir de algún punto, lo habitual entre los profesores es basarse en este español "lo más neutro posible", en esta gramática conocida por todos aunque solo usada por algunos, e ir añadiendo matices a medida que van apareciendo ejemplos provenientes de todas las partes del mundo.

Por todo ello, podemos afirmar que el español hace una interpretación del mundo que puede transmitirse a través de este "español neutro", una "lengua franca española", pero que, a la vez, es un cajón de sastre de imaginarios procedentes del continente americano, la Península Ibérica e incluso de ciertas regiones de África, Asia y el Pacífico.

¡Dejémonos llevar por el español para dar la vuelta al mundo!