¡La plataforma Altissia al rescate!

Siempre recordaré aquel mes de marzo de 2020: ¡confinamiento general! Entonces trabajaba como profesor de francés, inglés y neerlandés para Altissia. Concretamente, mi misión consistía en dirigir sesiones de práctica de idiomas (mesas de conversación, etc.) en toda Valonia.

Así que, en aquella época, pasaba una buena parte de mi tiempo en el coche yendo a reunirme con los alumnos y darles la oportunidad de practicar idiomas. ¡Y de la noche a la mañana, me encuentro en casa, físicamente aislado de mis alumnos! ¿Qué hacer, cómo facilitarles el contacto y seguir transmitiéndoles mi pasión?

La solución se evidenció rápidamente, tuve que pasarme al mundo virtual. Para ello, tenía la herramienta ideal al alcance de mi mano. De hecho, la plataforma Altissia me facilitó toda una serie de temas que luego pude enviar a mis alumnos con enlaces para que pudieran preparar las conversaciones, reunirnos en línea para tratarlas y algunos incluso después siguieron reuniéndose virtualmente durante días.

Como profesor «tradicional», yo no estaba del todo a favor de las clases virtuales, pero debo admitir que hoy en día suponen numerosas ventajas: accesibilidad a más alumnos, evidente ahorro de tiempo, compartir fácilmente documentos y enlaces…

Ni que decir tiene que lo virtual no es para todo el mundo y en cuanto tuve la oportunidad, volví a coger mi coche para reencontrarme con los defensores de lo presencial, pero hoy me siento plenamente realizado con este sistema híbrido que me facilita mantener el contacto con la profesión mientras trabajo de forma remota y aprovecho al máximo el potencial de la plataforma Altissia.